Vodafone entra en la "guerra de precios" y lanza una tarifa de 6 céntimos.

La filial española responde así a Yoigo, Movistar y Orange, que ya anunciaron con anterioridad ofertas similares.Vodafone España ha lanzado una tarifa de 6 céntimos al minuto para sus clientes de contrato, sumándose así a las ofertas de bajo coste que han lanzado hace poco sus competidoras de Telefónica y Orange.En concreto con la tarifa "XS6" la filial española de Vodafone permite llamar a todas horas y a todos los destinos por 6 céntimos al minuto, más 15 céntimos por establecimiento de llamada, donde además incluye fines de semana gratuitos, con un límite de 250 minutos al mes y sin establecimiento de llamada.Esta tarifa, que tiene una cuota de 6 euros al mes, incluye un consumo mínimo de 9 euros y estará disponible para su contratación en la próxima semana.Con esta oferta, Vodafone replica a Movistar, que anunciaba su "Tarifa 6", con las mismas condiciones de uso, y al "Básico 6" de Orange, que además de ofrecer llamadas a 6 céntimos , ofrece por igual mensajes de texto, haciendo que se avive la "guerra de precios" de las operadoras con red, ya que Yoigo también posee una oferta de llamadas similar.
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La guerra del tabaco fuerza al Gobierno a revisar su fiscalidad.

Las tabaqueras auguran el fin de la batalla comercial ante la falta de margen para seguir bajando tarifas.En el ministerio de Economía se analiza con preocupación la guerra del tabaco, que ha provocado una caída en los precios de las principales marcas de cigarrillos entre los 10 y los 45 céntimos de euro por cajetilla en el útimo mes.Y es que la principal perjudicada de esta rebaja de precios es la propia Hacienda Pública.Por cada 10 céntimos que baja la cajetilla, entre siete y ocho son impuestos hacia Hacienda.De hecho, según cálculos del sector, el impacto de la guerra comercial en las arcas públicas será de unos 200 millones de euros y si sumamos la caída de la recaudación que ya se venía produciendo la cifra asciende hasta superar los 1.000 millones.A esta situación, el Gobierno se plantea revisar su fiscalidad del tabaco para evitar unas pérdidas recaudatorias que pueden causar un agujero en unas ya deterioradas cuentas públicas.Elena Salgado ha rechazado que se produxca un cambio en la fiscalidad del tabaco, pero fuentes del Ejecutivo aseguran que podría abordarse en los Presupuestos del año 2012.Se está viendo que la guerra comercial entre las principales compañías tabaqueras está llegando a su fin, o al menos, está dando sus primeros coletazos.Altadis ha reducido los precios ante esto en la marca Ducados Rubio pero ha mantenido invariable el precio en marcas como Nobel o Fortuna, que el sector ha interpretado como una tregua.El fin de esta guerra sería una buena noticia tanto para tabaqueras como para el Gobierno, que evitaría así una caída de previsiones en la recaudación.Las compañías tabaqueras piensan que la solución no está en la subida de impuestos sobre el tabaco.Lo que proponen la mayoría de las tabaqueras que operan en España, salvo Altadis, es que se mantenga la presión fiscal, pero se cambie la estructura de los impuestos.Este modelo genera incentivos a unos precios bajos y fomenta guerras de precios.Las propuestas de los economistas de AFI pasa por equilibrar los impuestos específicos y los variables.
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Philip Morris baja los precios del tabaco por tercera vez en dos semanas.

Volverá a recortar entre 10 y 20 céntimos el coste de sus principales marcas de cigarrillos, como Marlboro, Chesterfield y L&M. En concreto la cajetilla de Marlboro reducirá su precio en 15 céntimos, desde los 4 a los 3,85€;Chesterfiled costará 3,50€, frente a los 3,70€ actuales; y L&M pasará de 3,40€ a 3,30€, informaron desde el sector.Estos cambios de coste, los terceros comunicados por el grupo al Comisionado para el Mercado de Tabacos en menos de un mes, mediante su publicación en la BOE, entrarán en vigor este miércoles.El movimiento de Philip Morris se produce una semana después de que Altadis decidiera bajar sus principales marcas para proteger su competitividad ante "el agresivo movimiento de precios realizado por uno de sus principales competidores", lo que propició que BAT se sumara a la batalla y arrastrara a JTI.Por su parte la ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, afirmó recientemente que el Gobierno no tiene previsto una subida de los impuestos sobre el tabaco, pese a que esta "guerra de precios" en la industria tabaquera que consideró una "cuestión temporal de ubicación en el mercado".
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El IPC interanual retrocede hasta un 2,7%

La tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en mayo en el 2,7%, lo representa una décima menos que en abril.Los analistas consultados por Bloomberg esperaban de media que el Índice de Precios al Consumo (IPC) permaneciera estable en el 2,8%.La inflación es uno de los mayores problemas ocasionados para el Banco Central Europeo en estos momentos y el principal motivo de que subieran los tipos de intereses.El objetivo de la entidad financiera es que el IPC se sitúe próximo por debajo del 2%.Esto hace que para el BCE sea un indicador de presiones inflacionistas para el mercado, ya que si el interés se sitúa tan bajo, el BCE tenderá a dar más créditos a los bancos comerciales y al BCE le interesa que este tipo de interés aumente para prestar menos dinero a estos bancos y equilibrar la inflación de los costes.

El déficit corriente de España sube un 29% en marzo, hasta los 5.739 millones

España ha registrado un déficit por cuenta corriente en marzo de 5.739,3 millones de euros, un 29% superior al de 2010 en el mismo mes (4.437,4 millones), según los datos publicados por el Banco de España.La evolución se explica por el aumento del déficit comercial y de rentas y por la ampliación del saldo negativo de transferencias corrientes y por la reducción del superávit del sector servicios.Este comportamiento tuvo lugar en un contexto de dinamismo de los flujos comerciales, tanto de las exportaciones como de las importaciones, que aumentaron un 17,3% y un 17,7%.La ampliación del déficit comercial se produjo por el deterioro del saldo energético, que aumentó en torno a un 20%, ya que el déficit no energético se corrigió poco.